¿Qué es la Epilepsia?

La epilepsia es uno de los trastornos neurológicos más comunes en todo el mundo. Es una enfermedad no transmisible y de larga duración, en algunas ocasiones no tiene una cura, pero sí existe un tratamiento que ayuda a controlar la enfermedad.

La importancia de conocer y difundir información acerca de la epilepsia radica en que se estima que el 70% de las personas con epilepsia podrían vivir sin convulsiones si se diagnosticaran y trataran adecuadamente. La epilepsia se caracteriza por episodios de convulsiones recurrentes.

Las convulsiones son movimientos involuntarios que involucran al cuerpo ya sea de forma parcial o generalizada (todo el cuerpo) y que se acompaña con pérdida de la consciencia. Son ocasionadas por descargas eléctricas excesivas que se producen en las neuronas de diferentes partes del cerebro.

La epilepsia es una enfermedad cerebral no transmisible crónica que afecta a las personas de todas las edades.(1)

  • Se estima que el 70% de las personas con epilepsia podrían vivir sin convulsiones si se diagnosticaran y trataran adecuadamente.(1)
  • La epilepsia es considerada en algunas regiones, la segunda enfermedad del sistema nervioso central más frecuente, después del dolor de cabeza y migrañas.

Es uno de los trastornos del sistema nervioso central más frecuentes, para algunos la segunda enfermedad neurológica que se ve con más frecuencia en la atención primaria de salud a nivel, mundial, después de la cefalea, siendo la primera de todas en el continente americano, en África, el este del Mediterráneo y el sureste asiático.(2)

Causas de la epilepsia

A pesar de conocer algunas de las causas de la epilepsia aproximadamente el 50% de los casos en todo el mundo son de origen desconocido. Entre los múltiples factores que contribuyen al desarrollo de epilepsia encontramos las malformaciones adquiridas desde el nacimiento, las alteraciones genéticas, el daño cerebral por lesiones, traumatismos craneoencefálicos graves, infecciones que afectan el cerebro como la meningitis y la encefalitis, tumores cerebrales, entre muchos otros.

Un tratamiento anticonvulsivante adecuado brindado por un médico calificado es ideal para controlar las convulsiones y lograr que las personas con epilepsia lleven una vida lo más normal posible. Según la OMS “es posible diagnosticar y tratar a la mayoría de las personas con epilepsia a nivel de atención primaria de salud sin el uso de medios sofisticados”.

Se caracteriza por convulsiones recurrentes, que son episodios breves de movimiento involuntario que pueden involucrar una parte del cuerpo (parcial) o todo el cuerpo (generalizado) y en ocasiones se acompañan de pérdida de conciencia y control de la función intestinal.

Las convulsiones se deben a descargas eléctricas excesivas de grupos de células cerebrales que pueden producirse en diferentes partes del cerebro. Las convulsiones pueden ir desde episodios muy breves de ausencia o de contracciones musculares hasta convulsiones prolongadas y graves. Su frecuencia también puede variar desde menos de una al año hasta varias al día.

La epilepsia no es contagiosa.

Aunque muchos mecanismos de enfermedad subyacentes pueden producir epilepsia, se desconoce la causa de la enfermedad en aproximadamente el 50% de los casos de todo el mundo.

Las causas de la epilepsia se dividen en las categorías siguientes: estructurales, genéticas, infecciosas, metabólicas, inmunológicas y desconocidas.

Entre ellas cabe señalar:

  • Daño cerebral por lesiones prenatales o perinatales (por ejemplo, asfixia o traumatismos durante el parto, bajo peso al nacer);
  • malformaciones congénitas o alteraciones genéticas con malformaciones cerebrales asociadas;
  • traumatismos craneoencefálicos graves;
  • accidentes cerebrovasculares que limitan la llegada del oxígeno al cerebro;
  • infecciones cerebrales como las meningitis y encefalitis o la neurocisticercosis;
  • algunos síndromes genéticos;
  • tumores cerebrales.

Es posible controlar las convulsiones. Con un tratamiento anticonvulsivante adecuado, hasta un 70% de las personas con epilepsia podrían vivir sin convulsiones.

Es posible controlar las convulsiones. Con un tratamiento anticonvulsivante adecuado, hasta un 70% de las personas con epilepsia podrían vivir sin convulsiones.(3)